En la vida profesional, es un requisito indispensable tener una visión de crecimiento. El estancamiento ocasiona una erosión competitiva que puede sacarnos de manera parcial o total en la meta que deseamos. La educación, conlleva a fortalecer nuestras habilidades e incrementar los conocimientos, por lo menos.
Mi necesidad era, hace algunos años, escalar a otro nivel académico, adicionalmente, a seguir satisfecho con mi vocación en el ámbito de la docencia e investigación en el área fiscal-empresarial, con las ansias de mayor aprendizaje. Y afortunadamente encontré al IEE con sede en Monterrey. Ésta fue y seguirá siendo mi casa en donde tuve una transformación, primero como maestro y actualmente como doctor. Dentro de mi estancia, conocí muchos compañeros de aula, docentes, profesionistas y trabajadores en general, que además de lo esencial, recibía consejos para fortalecer mi experiencia de vida.
Ahí concluí y validé, que formamos entre todos una familia, y que todos en conjunto, en los roles de cada uno, le damos vida al IEE. Siendo éste un ente que destella lo que esta intrínseco en su escudo: Tiene solidez, representa el saber y el conocimiento, cuenta con actividad cognitiva y es transformadora del intelecto. Todo ello lo viví y lo disfruté.
Los sueños, sueños son, pero cuando queremos ser alguien en la vida, nunca es tarde para dedicarle nuestra alma y corazón, estés en donde estés. Estaré siempre agradecido con el IEE, comprometiéndome a promoverlo, existiendo siempre un profesionista profesional, con visión global y actuación ética, en donde la humildad siempre será mi bandera.
Dr. SERGIO ARCOS MORENO
Huasteca Potosina